La Asociación Profesional de Axentes Forestais e Medioambientais de Galicia (Aprafoga) dio traslado ayer de la denuncia a un cazador de la parroquia de Dúas Igrexas, en el Concello de Forcarei, por el uso de una trampa de accionamiento por pisada.
Dos agentes forestales encontraron este artilugio de captura no selectivo cuando se encontraban realizando su turno de vigilancia habitual por este municipio. Según precisa el colectivo, esta trampa de carácter ilegal tenía atrapado en su interior un cuervo vivo. Los agentes procedieron a la inmediata liberación del animal.
Además, estos profesionales decidieron esperar en el lugar la llegada del propietario de este artefacto para poder proceder a realizar la correspondiente denuncia y, a mayores, decomisar la jaula.
Aprafoga aprovechó en la jornada de ayer la ocasión para recordar que la utilización de medios de captura no selectivos puede ser constitutiva de un delito ambiental castigado con una pena de prisión que puede oscilar entre los cuatro meses y los dos años o con una sanción económica. Precisan asimismo que la imposición de la multa comporta para el infractor la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho a practicar la caza o la pesca durante un período de tres años.